La rutina nos absorbe
Ha sonado el despertador y no ha pasado ni un segundo desde que lo has apagado, ya no te has dado cuenta de que era tu canción favorita la que sonaba, esa canción que decidiste poner para empezar el día con alegría. Sales de tu habitación corriendo para desayunar, vestirte e irte por la puerta, sin darte cuenta de aquella frase que leías todos los días “The power of Dreams”, sin observar como cada vez, aquellas fotos que te hacían revivir aquellos maravillosos momentos vividos con tu gente. Desayunas lo mismo de siempre, sin darte cuenta de que tu madre te ha comprado aquello que tanto te gusta, te vistes con lo primero que encuentras en el armario ignorando que hoy concretamente ha venido una tormenta y acabarás empapada y congelada. Coges el coche y no te das cuenta que está sonando tu canción favorita, que el peatón que está esperando para cruzar es tu antiguo compañero de instituto, que han puesto una nueva cafetería en la esquina de la plaza. Llegas a la universid