Respiro
Respiro, lentamente, recorro todo mi cuerpo como si de un escáner se tratara. Tristeza, impotencia, soledad, miedo... aparecen sin previo aviso inundando todo mi ser. Respiro, hondamente, analizo cada una de las emociones que me invaden. Recuerdos, experiencias, conflictos, historias pasadas que se clavaron en mi mente impidiéndome avanzar. Respiro, intensamente, la tranquilidad recorre cada uno de los rincones de mi cuerpo. Despierto, relajadamente, vuelvo a vivir mi presente.